jueves, 21 de noviembre de 2013

Reflexión


No he podido más con mis heridas...
ya llegaron hasta el hueso, me he empeñado en ignorarlas, en seguir abandonandome y entregando todo lo que soy a una persona que no lo aprecia, lo toma y lo arrumba.

Creo que habrá que tocar el fondo.  Tocarlo, acariciarlo y soltarlo.  Así como a tí: Abrazarte y soltarte, soltarte en el fondo de mi abismo mientras emerjo poco a poco hacía mi nuevo yo.


2 comentarios:

  1. Este comentario ha sido eliminado por el autor.

    ResponderEliminar
  2. tu alma contra la mia quizas chocaron en el abismo pero, yo que frecuento de los mas sordidos fondos de la ilógica, te aconsejo desde la virtud del anónimo, aunque sea victima del mismo pensar, abandones el picor visual que produce toda herida pues, hay cortes o heridas que nos hacen, y otros que nos hacemos nosotros mismos en un mal tropiezo o mala elección- Evitar los primeros en la medida de lo posible. Los otros vendran solos ;) evitar la zancadilla

    ResponderEliminar